Un beso abortado
es un beso final,
mas no el final de un beso.
Es un beso inmaduro
que rompe el silencio del alma
sin producir sonido.
Se sorprende de mover las aguas
y se retira cauteloso en su propio oleaje
fantaseando con haberse borrado,
olvidando su huella imborrable.
Un beso abortado
es un beso cobarde
mas no el final de un beso
Es un beso arrepentido
que saltó al vacío
casi por capricho
Para esos besos furtivos
hay bocas sin olvido
que no abortan suspiros
Que los evocan en sueños
humedeciendo labios escondidos
que estallan sin sentido
Por eso...Un beso abortado
es un beso final,
pero no el final de un beso.
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